jueves 18 de abril de 2024 - Edición Nº3680

Interés general | 4 oct 2018

Salud reproductiva

Advierten que es muy bajo el uso de anticonceptivos de larga duración en adolescentes

El implante subdérmico o los DIU son los que se recomiendan en mujeres jóvenes que quieren evitar el embarazo. Es porque su éxito no depende de la usuaria, pues una vez colocados aseguran más del 99 % efectividad.


CAPITAL FEDERAL (ANDigital) A pesar de que su uso está especialmente recomendado en adolescentes y en mujeres jóvenes, los anticonceptivos reversibles de larga duración (LARCs, según sus siglas en inglés) se encuentran “subutilizados”.

Esto es lo que advierte un reciente estudio norteamericano cuyas conclusiones acaba de publicar la prestigiosa revista Journal of the American Medical Association (JAMA), que halló que sólo el 14,3 % de las adolescentes y mujeres jóvenes recurre a anticonceptivos de larga duración como el implante subdérmico o los DIU, siendo que éstos constituyen la herramienta de primera elección para la prevención de un embarazo no planificado.

Las estadísticas norteamericanas de uso de anticonceptivos reversibles de larga duración son similares a las locales, comentó la doctora Marisa Labovsky, ginecóloga y presidente de la Sociedad Argentina de Ginecología Infanto Juvenil (SAGIJ).

“En la Argentina, es muy bajo el uso de LARCs en adolescentes y en mujeres jóvenes: no llega al 10 %. En su lugar, es mucho más alto el porcentaje que recurre al preservativo y a las píldoras anticonceptivas, a pesar de que los LARCs presentan la ventaja de que su efectividad no depende de la paciente: una vez colocados, tienen un porcentaje de falla menor al 1 %, lo que habla de métodos realmente muy efectivos”, puntualizó la especialista.

Es que a diferencia de las píldoras anticonceptivas, cuya efectividad en su uso habitual es sensiblemente menor a cuando son utilizadas en la forma recomendado (92 % versus 99 %), la efectividad de los LARCs es siempre mayor al 99 %, ya que una vez colocados sus efectos en la prevención del embarazo se mantienen independientemente de su usuaria.

Un ejemplo es el implante subdérmico, una varilla del tamaño de un fósforo que el médico coloca bajo la piel del antebrazo en el consultorio, y que durante tres años libera etonogestrel, una hormona que inhibe la ovulación y espesa el moco cervical, impidiendo la fecundación.

La doctora Labovsky destacó la seguridad de los LARCs disponibles en la Argentina: “no tienen estrógenos, que son los que tienen ciertas contraindicaciones (pues pueden causar trombosis). Los LARCs como el implante subdérmico contienen progesterona (etonogestrel), por lo que pueden ser usados en distintas situaciones como el posparto inmediato, la lactancia, en mujeres hipertensas, en fumadoras, todas situaciones en las que está contraindicado el uso de anticonceptivos con estrógenos”.

Según la especialista, la baja tasa de uso de los anticonceptivos reversibles de larga duración se explica en buena medida por los mitos que existen en torno a su utilización.

“Existe numerosos mitos, que son los que realmente se convierten en una barrera que impide su uso; no es cierto que no se pueden usar en adolescentes o en mujeres que no han tenido embarazos previos, como muchos creen, todo lo contrario: la Organización Mundial de la Salud los recomienda como método de elección para adolescentes, porque son seguros y efectivos, y quienes más seguridad y efectividad necesitan son las jóvenes, para evitar el embarazo no planificado”, detalló.

Cabe destacar que en Argentina, en octubre del 2014, se incorporó el implante subdérmico dentro del marco del Programa Nacional de salud Sexual y Procreación Responsable, junto con otros métodos conceptivos como: preservativos, anticonceptivos orales e inyectables combinados y sólo progesterona, dispositivos intrauterinos, anticonceptivos de emergencia. (ANDigital)

OPINÁ, DEJÁ TU COMENTARIO:
Más Noticias

NEWSLETTER

Suscríbase a nuestro boletín de noticias