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sábado 20 de abril de 2024 - Edición Nº3682

Policiales y Judiciales | 22 oct 2014

Acusado de abuso sexual

Lucas Puig: El docente que esperará seis años para tener un juicio justo

En el expediente no hay pruebas firmes en su contra, busca su absolución y hay elementos suficientes para sostener que fue víctima de la violencia institucional del Estado. Se lo detuvo, se lo liberó y aún -a cinco años del hecho- no pudo ejercer su derecho a defenderse de acusaciones que entiende como falaces.


LA PLATA-BUENOS AIRES (ANDigital) Cinco años atrás, dos madres que llevaban a sus hijos al colegio San Benjamín, ubicado en 140 y 57 de la localidad platense de Los Hornos, denunciaron al docente de música Lucas Manuel Puig ante la Justicia. El caso fue caratulado por la fiscal Virginia Bravo como “corrupción de menores”.

Por esa imputación, el acusado estuvo treinta días en prisión y pasó dos semanas con arresto domiciliario en su casa de Los Hornos. Sobre él pesa una carga y por eso pide a gritos desprenderse de la misma.

El acusado quiere tener un juicio cuanto antes, y quiere que el proceso sea justo. A este reclamo se sumó nada menos que el presidente de la Suprema Corte de Justicia, Héctor Negri, quien apurando a jueces y fiscales fijó en 2013 un plazo para que el debate oral y público se realice cuanto antes, dejando abierta la posibilidad de que el juicio se lleve a cabo en la feria judicial de enero de 2014.

Pero Puig cayó en el juego judicial. El juez Guillermo Labombarda tardó once meses en darse cuenta de que podía excusarse por tener una amistad con quienes denunciaron al profesor, entonces empezaron los traslados y las derivaciones.

La fiscal Helena de la Cruz se enfermó dos horas antes del juicio que se iba a iniciar en la feria judicial del año 2014. Entonces, se debió posponer el debate, una vez más.

En julio de este año todo parecía estar en óptimas condiciones y el debate se inició con un solo juez, Samuel Saraví Paz. En esa primera audiencia, la querella representada por el abogado Julio Beley solicitó ampliar la acusación contra Puig. Pidió re-caratular la causa y pasar a “abuso sexual”, pero esta carga necesita de un tribunal compuesto por tres jueces y un concurso previo para la designación de los mismos.

Entonces, los plazos volvieron a estirarse, nuevamente. Lo llamativo fue que el único argumento para ampliar esta acusación fue el testimonio de una testigo, cuyo relato se dio a puertas cerradas, pese a que Adrián Fernandez Koening, uno de los abogados del acusado, pidió que el juicio sea oral y público, abierto a la prensa. Su requerimiento fue negado.

Por todo esto, el profesor de música se presentó este miércoles por la mañana en las escalinatas del Fuero Penal de La Plata junto a familiares, amigos y docentes nucleados en los gremios de SADOP, SUTEBA y UDocBA, haciendo público su reclamo de un juicio justo, rápido y efectivo.

Puig explicó que ya hay una nueva fecha para debatir si fue culpable o no del delito de abuso de menores. Será el 19 de abril del año 2016. Así las cosas, son seis los años que debe esperar para que termine su letargo.

Llama la atención que el acusado es quién más lucha por que se sepa la verdad y por acelerar los plazos, cuando comúnmente esto no es así. En la mayoría de los casos, es la parte que acusa la que no toleraría que una persona acusada de semejante delito esté en libertad a la espera de un juicio en el cuál se determine su autoría.

“En parte aún cargo con un estigma. Aunque también ese es un estigma propio de la lucha. Es saber que a todos los docentes les puede suceder algo así”, pero no somos el blanco de una cacería de brujas”, explicó Puig ante ANDigital.

Consultado sobre si todas estas situaciones son producto de una causa armada, un capricho, una persecución, negligencia del Poder Judicial platense o un poco de todo, dice conteniendo su bronca: “Es la Justicia quien debe responder eso”.

En el expediente no hay pruebas firmes en su contra. Puig busca su absolución y hay elementos suficientes para sostener que fue víctima de la violencia institucional del Estado. Se lo detuvo, se lo liberó y aún a cinco años del hecho no pudo ejercer su derecho a defenderse de acusaciones que entiende como falaces.

Por ahora, la fecha clave es el 16 de abril del año 2016., al menos por el momento. (ANDigital)

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