Tensión entre Provincia y la Suprema Corte por la polémica sobre las “causas armadas”

LA PLATA-BUENOS AIRES (ANDigital) Una inusitada tensión se desató entre el Gobierno bonaerense y la Justicia provincial luego de que María Eugenia Vidal saliera al cruce de las declaraciones del titular de la Suprema Corte, Eduardo De Lázzari.

“Si el presidente de la Suprema Corte cree que hay causas armadas o persecuciones está obligado a denunciarlo. Uno tiene que ser consecuente con lo que dice en la acción judicial”, apuntó Vidal, durante una entrevista televisiva el último domingo.

La máxima autoridad del Alto Tribunal bonaerense había advertido la existencia de “causas armadas artificialmente” y episodios de “abuso de arrepentidos” y “fallos mediáticos”, alertando también por la posibilidad de que este tipo de prácticas se repliquen en la Provincia.

No obstante, tras el alto voltaje que tomaron sus declaraciones –Cristina Fernández de Kirchner se hizo eco en las redes sociales- y el fuerte pronunciamiento de la gobernadora bonaerense, De Lázzari minimizó sus dichos y le bajó el tono a la disputa.

A través de un comunicado, explicó que sus dichos se enmarcaron en “una reunión con más de cien jueces penales, en la que se debatieron cuestiones propias del fuero”.

Párrafo siguiente, expresó que sus dichos buscaban alertar por situaciones de “abuso del proceso penal”, y puso como ejemplo la situación del juez federal de Dolores, Alejo Ramos Padilla, al hacer hincapie en que sus dichos aludían a que “comenzaban a registrarse situaciones conflictivas en el ámbito provincial, a semejanza de lo que públicamente es conocido en la órbita federal, en donde se está sustanciando una trascendente causa ante el Juzgado Federal de Dolores, con intervención de la Cámara Federal de Apelaciones de Mar del Plata y del Tribunal de Casación Penal”. (ANDigital)