viernes 29 de marzo de 2024 - Edición Nº3660

Política | 3 sep 2014

Informe

Todos se mueven en La Plata para quedarse con el Sillón Municipal

A poco menos de un año pasa las primarias abiertas, simultáneas y obligatorias, tanto el Frente para la Victoria, como el Frente Renovador y el Frente Amplio Progresista empiezan a delinear quienes competirán en esa contienda. Si bien a priori las cosas parecen estar claras, no lo es tanto cuando se hurga en este juego político y en las estrategias que cada uno utilizará de cara a lo que viene. Pase y vea de qué se trata esto.


El Frente para la Victoria empieza a mostrar sus candidatos

A falta de un año para la realización de las PASO que definirán los candidatos de cada frente con vistas al recambio institucional de 2015, el oficialismo de La Plata comienza a perfilar una primaria que tendrá características similares a las del 2011.

Dentro del bruerismo, es un secreto a voces que será Pablo Bruera quien nuevamente busque lograr un tercer mandato; aunque han asomado distintas voces que planteaban la necesidad de un recambio de nombres, aduciendo cierto desgaste de la imagen del intendente tras la hecatombe que significó la inundación del 2 de abril del año pasado, el mal manejo institucional tras ese desastre y el resultado de la elección de medio término, que derivó en una clara derrota del oficialismo en 2013, en manos del Frente Renovador.

Amén de ello, el jefe comunal será la cara visible del FpV y, por ahora, la campaña se basa en pegar su figura a la gestión, ya que los operadores brueristas interpretan en ello al crecimiento de su imagen positiva entre los vecinos: si antes del fatídico 2 de abril se llegó a un techo del 70 % de imagen positiva, y tras la catástrofe cayó a un 15 %, alcanzar ahora un 30 % no es nada despreciable. La confianza es lo que reina en los despachos de Calle 12, con esos números en la mano.

Bruera no será el único aspirante a la Jefatura Comunal en La Plata, ya que así como en el 2011, elección en la que terminó segundo, Esteban Concia volverá a ser de la partida, seguramente en representación de una de las vertientes del peronismo en las PASO, y su campaña se visibiliza siempre asociada al director ejecutivo de la ANSeS, Diego Bossio, quien también posee aspiraciones en Provincia y/o en Nación.

El randazzismo también postula sus nombres, entre quienes aparecen la exconcejala Teresa Razzari, y el subsecretario de Población de la propia Municipalidad de La Plata, Ezequiel Auspitz –hijo de César Auspitz, fotógrafo de Florencio Randazzo en el Ministerio del Interior y Transporte de la Nación y dirigente del PJ local–.

Otro que busca posicionarse fuerte es el senador provincial Emilio López Muntaner, ya despegado del oficialismo bruerista, oficialmente lanzado y dispuesto a instalar su candidatura de la mano del vicegobernador Gabriel Mariotto y La Cámpora.

De este modo, y al momento, serían entre 4 y 5 los candidatos que presentaría el Frente para la Victoria.


Sólo una figura “uniría” a todos en el Frente Renovador

En el massismo la cosa está bastante clara, de acuerdo a las líneas internas que se evidencian de cara a las elecciones del año próximo, aunque sólo una figura sería la que, de aceptar liderar, sintetizaría a todos y los encolumnaría detrás de su figura: el presidente del bloque de diputados bonaerenses del FR, Jorge Sarghini.

Sin embargo, el otrora ministro de Economía provincial no estaría muy dispuesto a aceptar el convite, y declinaría de tal cargo so pretexto de querer dedicar el tiempo que su familia necesita de él, algo que vuelve a su postulación una empresa de casi imposible resolución.

Así las cosas, en el FR se destacan algunos referentes claros, como los ediles José Ramón Arteaga, líder de la bancada en el Concejo local y de buenos porcentajes en cuanto a conocimiento e intención de voto, y el histórico Oscar Vaudagna, quien jamás ocultó sus intenciones de ser intendente. A ellos se suma Carlos Melzi, de manifiestas deseos en este terreno, quien integra la Corriente Renovadora junto a los diputados provinciales Daniel Monfasani, Pablo Garate y Sergio ‘Chino’ Villordo, entre otros dirigentes bonaerenses.

A este grupo se puede sumar el otrora presidente del HCD, Javier Pacharotti, de quien aún no se sabe a ciencia cierta si es verdadera su ruptura con el bruerismo, o si se trata de una de esas estrategias que el mandamás platense aprendió de su mentor, el hoy ministro de Justicia nacional, Julio Alak, y decidió poner un huevo en la otra canasta.

Esto último se daría si se cumple aquello que ‘el armador’ del FR local, Juan José ‘Tío’ Amondarain, le expresó a sus íntimos, y es que así como Martín Insaurralde pegará el salto al FR, aunque a principios del año próximo, lo hará con su grupo más cercano de intendentes bonaerenses, como Eduardo ‘Bali’ Bucca, de Bolívar; Juan Pablo De Jesús, del Partido de La Costa, y el propio Pablo Bruera, de La Plata –especie que deberá corroborarla el tiempo–, con lo cual la ida de Pacharotti no sería otra cosa que la antesala del salto del jefe.

Amondarain –como se dijo, el armador del FR–, no será de la partida en la contienda, ya que su futuro estaría en un estratégico lugar en Nación: habría solicitado la Secretaría de Inteligencia (SI), y Sergio Massa le habría anticipado que se despreocupara, porque ese espacio era suyo. Naturalmente se hará en caso de que el tigrense gane las elecciones presidenciales.


En el FAUnen aún todo es esperar, para negociar

En la UCR la cuestión se torna complicada, ya que las apetencias electorales de los referentes están sujetas fuertemente a la consolidación del FAUnen en general, y de los comicios internos radicales de este 7 de septiembre en particular.

Según una fuente confiable del radicalismo más ortodoxo (aquellos que no fueron ni transversales, ni radicales K y ahora mucho menos radicales en el FR), en esas filas son más los que quieren pelear algo que los que realmente pueden. Esto se da por la sencilla razón de que hay que esperar qué depara la interna de este domingo (que dará más peso específico a los triunfadores para luego negociar y pelear dentro del Frente Amplio), de cara a las elecciones PASO que se dirimirán dentro de un año.

En términos provinciales, la UCR ya tiene dos candidatos lanzados: el platense Miguel Bazze, y el pergaminense, Héctor ‘Cachi’ Gutiérrez. En rigor, están “lanzados” bajo la premisa clásica de “el que no se postula, luego no negocia”, respecto a los otros precandidatos del FAUnen, como Margarita Stolbizer. Todo hace parecer hoy (hoy, no dentro de un año), que el radicalismo en el Frente Amplio iría con lista de unidad en el plano provincial, no así en los distritos, donde se iría a la contienda de primarias abiertas simultaneas y obligatorias.

En ese caso, en la capital bonaerense los que tienen fuertes apetencias y algunas posibilidades de negociación son el exdiputado Sergio Panella –también actual vicepresidente del comité Provincia– si sale bien parado el 7 de septiembre, o Marcelo Uriarte y Marcelo Viñes, por parte del alfonsinismo, también en caso de congraciarse filas adentro el próximo domingo.

Luego está el caso de los concejales Gastón Crespo y Emiliano Fernández (FAP), y los radicales Juan José Cardozo y Fernando Gando, quienes están también condicionados a los vaivenes del FAUNEN en general, y a los comicios internos del radicalismo de este domingo en particular, sorteando la misma suerte y tiempos de sus superiores partidarios seccionales y bonaerenses. Por ende, en estas filas hay mucho tiempo que esperar.


El PRO busca candidato

El espacio que conduce Mauricio Macri busca hacer pie en la Provincia, de la mano de la vicejefa de Gobierno porteño María Eugenia Vidal, y si la idea es esa, no se puede despreciar la capital bonaerense.

Por ello, los operadores en el territorio mandaron a medir a una serie de referentes sociales, aunque alejados del mundo de la política: los futbolistas Juan Sebastián Verón y Guillermo Barros Schelotto –este último amigo personal del jefe de Gobierno porteño–, y al fiscal Marcelo Romero, entre otros.

Los niveles de conocimiento e imagen de todos son naturalmente altos, y las intenciones de votos también, aunque caen en relación a esos números que presentan las imágenes positivas, lo cual es lógico: cuando un referente social se sube a la arena política, la desconfianza sigue siendo la moneda más corriente entre la gente.

Sin referente local fuerte desde lo político, el PRO sigue apostando a la misma fórmula que le dio éxito en Santa Fe, con Miguel Del Sel; en La Pampa, con Carlos Javier MacAllister, y en Entre Ríos, con Alfredo De Angeli. ¿Será lo mismo en La Plata?

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