El Gobierno avizora una “estampida” de intendentes massistas “maltratados”

CAPITAL FEDERAL (ANDigital) El jefe de Gabinete de la Nación, y precandidato a gobernador bonaerense por el Frente para la Victoria, Aníbal Fernández, pronosticó una “estampida” de intendentes massistas “apenas abran la tranquera” en el Frente Renovador.

En este sentido, el funcionario sostuvo que los alcaldes “son maltratados” y muchos “iniciaron un camino y se dieron cuenta que no era el mejor”, cuando se fueron del kirchnerismo.

“No me voy a enojar si un peronista quiere volver a trabajar en el peronismo, sería un contrasentido”, enfatizó el ministro coordinador en su habitual conferencia de prensa matinal en la Casa Rosada.

Además, dijo haber leído que “a (el intendente de Malvinas Argentinas, Jesús) Cariglino lo expulsaron, lo despidieron, del Frente Renovador, y a (el titular del bloque massista en la Cámara de Diputados de la Nación, Darío) Giustozzi lo conminaron a tomar una decisión” de permanecer o no en ese espacio.

“Los intendentes pueden haberse sentido atraídos por una propuesta, y con el tiempo se van dando cuenta que es una fantochada, que no hay seriedad, que no hay acompañamiento”, analizó Fernández.

En tanto, reveló: “yo he hablado con muchos que me han llamado, manifestando la vocación de irse, y me parece que va a ser una estampida el día que se abra la tranquera”.

“No tiene que ver con otra cosa que con la dignidad de los intendentes, que son maltratados y puestos en un lugar en el que no son tenidos en cuenta para nada”, sentenció el titular de la mesa ministerial de la Nación.

Multitudinaria interna

Por otra parte, el jefe de Gabinete coincidió con la presidenta Cristina Fernández de Kirchner respecto a la gran cantidad de precandidatos oficialistas a la Presidencia y a la Gobernación bonaerense, al reiterar que quienes no miden favorablemente en las encuestas deben “dar un paso al costado”.

En este sentido, opinó que para la Jefatura de Estado “debieran ser dos fórmulas, no más que eso, y en la provincia de Buenos Aires, tres o cuatro”, pues sino “lo único que se genera es una dispersión inútil”.

“Con las mediciones en la mano, hay que sentarlo frente a frente y analizar lo que está sucediendo y aspirar a que comprenda la realidad; no hay más que eso”, argumentó.
En este sentido, se preguntó: “¿Qué sentido tiene que sigan generando un conflicto de estas características? Porque además vamos a tener un lío de boletas terrible si hay tantas personas”. (ANDigital)