martes 23 de abril de 2024 - Edición Nº3685

Política | 19 may 2016

Legislatura bonaerense

Emergencia Administrativa: Una tarde de furia que tuvo insultos, empujones y agresiones

El clima se caldeó mientras se votaba la ley. “Ustedes la quieren pudrir”, le recriminó el presidente de la Cámara Baja, Jorge Sarghini, a un diputado opositor. Desde el Frente para la Victoria acusaron el golpe: “Esta es la democracia del PRO”. Legisladores se trenzaron y se agarraron del cuello en el recinto. El bochorno terminó con corridas en los pasillos y destrozos en el palacio legislativo.


LA PLATA-BUENOS AIRES (ANDigital) En una jornada de tensión tanto afuera como adentro de la Legislatura bonaerense, la Cámara de Diputados aprobó el proyecto que declara la Emergencia Administrativa y Tecnológica en la provincia de Buenos Aires por el término de un año para agilizar los procesos licitatorios de bienes y servicios.

Cambiemos contó con el acompañamiento del Frente Renovador y el FAP, mientras que los tres bloques del Frente para la Victoria -FpV, FpV-PJ y Peronismo para la Victoria- junto a la izquierda votaron en contra.

Desde temprano se respiraba un clima enrarecido en los alrededores del Parlamento bonaerense. Tal como lo habían anticipado, miles de trabajadores estatales, nucleados en más de 20 gremios, se manifestaron en Plaza San Martín para reiterar el rechazo a la iniciativa, por considerarla como una herramienta que “promueve contratos basura y desguaza el Estado”.

El desencadenante del conflicto durante la sesión fue la controversia por el uso de la palabra. Según esgrimió el presidente de la Cámara Baja, Jorge Sarghini, en la comisión de Labor Parlamentaria se había acordado que hablara sólo un legislador por bloque.

Fue el diputado del Frente para la Victoria, Miguel Funes, quien se dispuso a hablar, actitud Sarghini contrarrestó por entender que estaba incumpliendo con lo que se había acordado en un primer término. El cruce derivó en acusaciones que fueron subiendo el tono hasta se le concedió la palabra al titular del bloque FpV-PJ, Walter Abarca.

En ese instante, comenzaron los desmanes en los alrededores del edificio. Apostados sobre calle 7, un grupo de gremialistas incendió las rejas de entrada a la Legislatura y logró acceder al predio. Acto seguido, rompieron varios vidrios de las puertas de entrada del palacio legislativo.

El FpV denunció “represión” contra los trabajadores, y solicitaron a la autoridad de la Cámara el ingreso de una decena de gremialistas, pedido que fue denegado.

De inmediato, el jefe de bloque de Cambiemos, Jorge Silvestre, hizo uso de la palabra para pedir una moción de orden que fue aprobada y, de ese modo, se procedía a votar la Emergencia habiendo dado por cumplido el uso de la palabra de todas las bancadas. Fue el detonante para lo que sucedería minutos después.

Cuando Sarghini dio lugar a la votación en general, desde el FpV se levantaron de sus bancas y estallaron con una lluvia de gritos y reproches.

“Sos un caradura”, le enrostró el dirigente del Movimiento Evita, Fernando ‘Chino’ Navarro, a Silvestre, y mirando hacia el palco de prensa, espetó: “Esta es la democracia del PRO”. Todos los diputados del FpV salieron disparados de sus bancas aplaudiendo irónicamente para hacer visible su disconformidad.

En simultáneo, Sarghini avanzó también con la votación en particular y dio por finalizada la sesión. A partir de ahí, la acalorada discusión mutó hacia el centro del recinto, con manotazos, insultos y forcejeos. Funes, quien había protagonizado el primer cruce de la tarde, denunció que fue tomado del cuello por alguien desconocido. En medio del tumulto, al que se sumaron asesores y secretarios legislativos, varios terminaron desparramados por el piso.

Un enfrentamiento particular vivieron Sarghini y Abarca, quien se acercó hasta la ubicación del presidente. “Ustedes la quieren pudrir”, le dijo la máxima autoridad al legislador de Saladillo, según pudo saber ANDigital.

Los encontronazos se trasladaron a los pasillos de la Legislatura, donde continuaron los insultos de un lado y otro, y hasta se produjeron corridas.

Una vez recuperada la calma, y en diálogo con los medios de comunicación, Sarghini indicó que “lo acordado era un orador por bloque”, y explicó que impidió el ingreso de gremialistas porque “el clima afuera de la Legislatura se iba poniendo cada vez más complejo”.

“El Frente para la Victoria va a tener que entender que han perdido la elección y que ya no tienen la mayoría absoluta para hacer en este recinto lo que les parece”, disparó.

En tanto, desde el oficialismo celebraron la aprobación de la ley. “Buscamos mejorar el Estado provincial y revalorizar las condiciones laborales de los trabajadores. En ese aspecto, la Ley 10.430 que legisla las condiciones laborales no se ve afectada”, afirmó el diputado Manuel Mosca, quien desmintió que haya habido represión contra los trabajadores que se movilizaron, pese a la acusación del FpV.

En conferencia de prensa, los diputados de los tres bloques del FpV anunciaron que pedirán la nulidad de la sesión. “Tenemos certezas de que no estaba la cantidad de legisladores para votar la moción que hizo Cambiemos”, aseguró Abarca.

“Yo estaba haciendo uso de la palabra y le pedí al presidente ver qué estaba pasando en los palcos, porque se estaban desalojando. Me cortó el uso de la palabra, y después habilitó al presidente de bloque de Cambiemos”, expuso, en relación al episodio que desataría el bochorno.

Para finalizar, apuntó directamente contra el massismo, espacio que respaldó en silencio al oficialismo y posibilitó que se sancionara la Emergencia Administrativa: “Quiero llamar a la reflexión al jefe del Frente Renovador, porque nos sorprende que quienes se dicen peronistas y que vienen a renovar la política, estén aprobando esta ley de flexibilización laboral”.

“Que Sergio Massa se decida de qué lado quiere estar”, concluyó. (ANDigital)

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