viernes 29 de marzo de 2024 - Edición Nº3660

Policiales y Judiciales | 11 dic 2021

Caos

Miramar: Masiva movilización por el crimen de Luciano terminó con brutales enfrentamientos

Ocurrió este viernes por la tarde. Familiares y amigos del joven de 16 años fueron reprimidos con balas de goma. Los manifestantes arrojaron piedras y hasta bombas molotov. Las imágenes.


MIRAMAR-BUENOS AIRES (ANDigital) La masiva movilización autoconvocada para exigir Justicia por el aberrante crimen de Luciano Olivera, el joven de 16 años de edad que fue brutalmente asesinado por un agente, terminó con fuertes enfrentamientos que incluyeron una represión policial con balas de goma.

Los manifestantes arrojaron piedras y hasta bombas molotov, y la cosa verdaderamente se desbordó y concluyó con una gran cantidad de civiles y uniformados heridos.

La concentración estaba prevista para las 17 horas aunque un rato antes la gente ya copaba la plaza céntrica, en la calle 21 y la avenida 26 bajo un mismo pedido: basta de “gatillo fácil”.

Sin embargo los incidentes comenzaron minutos antes de las 19, cuando los manifestantes arribaron a las inmediaciones de la Comisaría que era resguardada por medio centenar de efectivos de Infantería, y de la cual también habían sido retirados todos los patrulleros por prevención.

En ese marco, un grupo se desprendió de la concentración y comenzó a arrojar piedras y hasta una bomba molotov a los uniformados, quienes se agruparon con sus escudos y, a partir de allí, personal de infantería comenzó a dispararles balas de goma a los manifestantes, hasta que otra formación avanzó por uno de las calles laterales de la dependencia y lanzó gases lacrimógenos para terminar de dispersar a los manifestantes.

Algunas personas también violentaron un paseo de compras ubicado en las inmediaciones y que había cerrado sus persianas minutos antes, informó Telam.

El crimen de Luciano sucedió alrededor de las 3 de la madrugada de este viernes cuando circulaba a bordo de su motocicleta marca Yamaha YBR de color roja e intentó eludir un control policial, fue perseguido e interceptado de frente por un móvil en la calle 9, entre 34 y 32.

Allí los cuatro agentes que iban en el patrullero se bajaron y, de acuerdo al relato del sindicado como el autor del disparo que a la postre sería mortal, el muchacho volvió a acelerar su moto hacia uno de los efectivos, motivo por el que “preventivamente desenfundó su arma Bersa calibre 9 milímetros de la que accidentalmente se le escapó un tiro”, de acuerdo a la descripción policial del hecho.

El joven recibió el impacto en la zona torácica e inmediatamente cayó al piso; se solicitó una ambulancia que sólo arribó para constatar su fallecimiento. (ANDigital)

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