miércoles 24 de abril de 2024 - Edición Nº3686

Policiales y Judiciales | 22 sep 2022

Terrible

Detienen al “Teto” Medina por reducción a la servidumbre y explotación laboral

El ex VideoMatch fue detenido en su departamento de Palermo. La causa implicó 26 allanamientos, 17 detenidos y una organización de tipo secta desmantelada. Pase y vea.


CIUDAD DE BUENOS AIRES (ANDigital) Tras un megaoperativo policial que incluyó allanamientos en distritos del Conurbano bonaerense, de la CABA y de Córdoba, se detuvo este jueves al popular mediático durante la década del 90 Marcelo “Teto” Medina en una causa por asociación ilícita, reducción a la servidumbre y explotación laboral.

Medina es la cara más visible de la comunidad terapéutica “La Razón de Vivir”, que apunta a asistir y recuperar a jóvenes con severos problemas de adicciones, sobre la que se recibieron decenas de denuncias de supuestas víctimas de estos hechos que se le imputan.

A partir de los testimonios y de recabar información al respecto el fiscal Daniel Ichazo, titular de la UFI Nº 1 Descentralizada de Berazategui, ordenó una serie de allanamientos que resultaron ser unos 26 en los distritos de Berazategui, Esteban Echeverría, Almirante Brown, Florencio Varela, Quilmes, La Matanza y General Rodríguez, en la provincia de Buenos Aires, además de la Ciudad de Buenos Aires y en Córdoba, y se detuvo a 17 personas.

Medina, involucrado en la causa, fue detenido en su departamento de la calle Cabello al 3100 de la CABA, y de allí fue trasladado a sede judicial donde tanto Ichazo, a cargo de la Unidad Fiscal de Delitos Conexos a la Trata de Personas, Pornografía Infantil y Grooming de Berazategui, Como Adrián Villagra, del Juzgado de Garantías Nº 8 del Departamento Judicial Quilmes, decidirán su futuro.

La investigación se originó por denuncias que sostenían que en la comunidad terapéutica “La Razón de Vivir”, orientada a personas con adicciones en la zona sur del Conurbano bonaerense, se sometería a trabajos y servicios de servidumbre con fines de explotación laboral a quienes asisten para su rehabilitación, y se logró identificar a aproximadamente 200 víctimas, entre mayores y menores de edad, y a 19 victimarios.

En dichos testimonios se hacía mención que todos fueron internos de las siete quintas ubicadas en las localidades de Virrey del Pino, General Rodríguez, La Matanza, Glew, Florencio Varela y en la provincia de Córdoba, donde abonaban grandes sumas de dinero a los directores con el fin de recibir un tratamiento de rehabilitación y eran obligados a efectuar trabajos de albañilería y carpintería cuyos productos luego eran puestos a la venta.

En la investigación se determinó que en esos centros terapéuticos Medina participaba activamente desarrollando actividades pergeñadas por los representantes de la organización, e incluso se lo observa en diversos videos de redes sociales dialogando con las personas en el marco de la realización de sus labores en la comunidad.

En sus redes sociales Medina se presenta como “operador socioterapéutico especialista en adicciones” y dador de “charlas motivacionales”, y sus funciones alcanzaban tanto a “La Razón de Vivir” como a “Elección de Vida”, de acuerdo al nombre de la otra comunidad terapéutica.

Con líneas intervenidas y más de 60 CDs de escuchas telefónicas, la Justicia pudo constatar que los pacientes sufren “controles y castigos privativos de la libertad en caso de mala conducta como así también cuando manifiestan deseos de irse del lugar o abandonar el tratamiento”, y en estos casos eran engañados al ser llamados por supuestos policías, fiscales o jueces quienes les informaban que serían detenidos en unidades carcelarias en caso de abandonar el lugar.

En la investigación se constataron pagos de entre $ 35.000 y $ 200.000 a modo de cuota mensual por parte de los familiares

Entre los 17 detenidos, y además de Medina, hay dos casos muy particulares: uno es el del sujeto cuyas iniciales son MT, un exagente de la Policía Federal Argentina sobre quien recaen denuncias de trato militarizado, maltrato verbal y psicológico, algo que incluso sus propios compañeros de la organización comentan en las escuchas.

Además, una mujer cuyas iniciales son TL integra la Policía Bonaerense con jerarquía de oficial y que cumpliría el rol de amenazar a los internos que desean abandonar las quintas, presentándose uniformada o incluso haciéndose pasar por fiscal o jueza dentro de los centros, advirtiendo a los mismos que podrían ir presos en el caso de volver a fugarse del lugar o que se comportan de manera indebida. (ANDigital)

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